Receta de tortitas saludables

Receta ↓ Ángela Solar

Estas tortitas saludables son una delicia: son tiernas, esponjosas y ligeramente dulces, y están hechas con ingredientes simples y naturales. Además, son sencillas de preparar, así que podrás disfrutar de un desayuno o una merienda perfectos en un abrir y cerrar de ojos! Y lo mejor de todo: es una nueva receta que seguro que querrás añadir a tu repertorio.

Ingredientes clave para tortitas que enamoran

Para que te conquisten desde el primer bocado, es esencial seleccionar ingredientes que les confieran esa textura que se deshace en la boca y un gusto que te transporte a un mundo de dulces despertares. Aquí va la lista de tus nuevos aliados en la cocina:

• Harina integral – No solo aporta consistencia a nuestras tortitas, sino que también nos brinda esa sensación reconfortante de estar nutriendo el cuerpo con cada mordisco. Atrévete a mezclar con harina de espelta o centeno para variar.
• Huevos – El alma de la receta, que amalgama los ingredientes con maestría. Si prefieres algo más suave, opta por las claras y deja las yemas a un lado.
• Leche – El ingrediente versátil que puedes elegir según tus gustos y necesidades, desde la tradicional leche de vaca hasta opciones vegetales que aportan un sutil toque distintivo.
• Endulzante de origen natural – Dale ese punto dulce con miel o sirope de agave, y disfruta sin pensar en calorías de más.
• Levadura en polvo – Observa cómo este polvillo prodigioso hace que tus tortitas se inflen, prometiendo una textura que parece acariciar el paladar.
• Una pizca de sal – No subestimes este pequeño gran detalle que tiene el poder de intensificar los sabores y crear un equilibrio perfecto en tu plato.

Preparación de los ingredientes

Antes de que el aroma de las tortitas inunde tu cocina, vamos a preparar juntos los ingredientes. Sigue estos pasos y verás qué sencillo es.

• Mezcla de los ingredientes secos – Empieza por unir la harina integral, la levadura en polvo y esa pizca de sal que realzará los sabores. Si te sientes aventurero, ¿por qué no pruebas con una mezcla de harinas? La de avena puede darle un toque interesante.
• Incorporación de los húmedos – Es el momento de añadir los huevos y la leche. Puedes optar por leche de vaca o, si prefieres, una alternativa vegetal que aporte un nuevo matiz. Bate con entusiasmo hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.

¡Vamos a darle vida a estas deliciosas tortitas juntos! Recuerdo los domingos de mi infancia, cuando mi madre preparaba tortitas para toda la familia. Desde entonces, me encanta cocinarlas y experimentar con distintos elementos y coberturas.

Lo primero que haremos es preparar la sartén o plancha para cocinar nuestras tortitas. Calentamos la superficie a fuego medio-bajo y engrasamos ligeramente con mantequilla o aceite. ¿Sabías que puedes usar diferentes aceites para darle un toque único a tus tortitas? Prueba con aceite de coco o de oliva para una experiencia culinaria extra. Mi secreto: ¡calienta el aceite antes de agregarlo! Esto ayudará a que se doren uniformemente.

Una vez caliente, vertemos una porción de la mezcla en la sartén, extendiéndola suavemente con una espátula para darle forma redonda. Cocinamos la tortita durante 2-3 minutos, o hasta que burbujas empiecen a formarse en la superficie y los bordes se vean dorados. Mi truco: ¡no la toques! Deja que la magia ocurra y espera a que esté lista para darle la vuelta.

Con cuidado, le damos la vuelta a la tortita y cocinamos durante otros 2 minutos, o hasta que esté completamente cocida y dorada por ambos lados. Retiramos la tortita de la sartén y la colocamos en un plato forrado con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Repetimos el proceso con el resto de la mezcla, asegurándonos de engrasar la sartén entre cada tortita para evitar que se peguen. Recuerda: ¡la clave de unas tortitas perfectas es la paciencia!

¡Ahora es el momento de dejar volar tu creatividad! Servimos las tortitas calientes con los acompañamientos de nuestra elección, como frutas frescas, miel, sirope de arce o crema agria. ¡Buen provecho!